Consejos antes de comprar un telescopio

Se acercan las navidades y es muy probable que en este momento surja la pregunta "¿y si pido un telescopio para navidades?" Es una pregunta que, en muchas ocasiones, resulta muy difícil de responder, y a la que todos los aficionados nos hemos enfrentado alguna vez. Por esto, desde aquí, vamos a intentar arrojar algo de luz sobre este tema, intentando guiar un poco a aquellas personas que empiezan y se encuentran un poco desorientadas.
Pero no os confundáis, no vamos a hacer un tutorial sobre qué telescopio comprar, es decir, no vamos a hablar de tipos de telescopios y no vamos a opinar sobre las distintas marcas y modelos. Nada de eso. Vamos intentar responder a esa rebuscada pregunta para intentar averiguar si realmente necesitamos un telescopio. Reconozco que no es fácil y que los consejos que podéis leer a continuación son fruto de la experiencia y, por lo tanto, son completamente subjetivos y pueden alejarse de otras opiniones, por lo que hay que tomarse todo esto como una simple guía.

Si quieres aprender astronomía contacta con AstroAfición
AstroAfición - Actividades educativas y Astronomía

Si estás leyendo esto es porque ahora, o en algún momento, se ha despertado en ti un cierto interés por la astronomía, por la física o por la ciencia en general. Puede que ese interés venga de mucho tiempo atrás y ya no recuerdes cómo apareció. Puede que haya surgido de una reciente visita a algún planetario, o puede que, simplemente, una noche levántases la vista al cielo y el espectáculo que se esconde ahí arriba te atrapó. Da igual de donde haya surgido, lo importante es que tienes ganas de observar, de conocer, de aprender, de descubrir el cielo.
Pero antes de aventurarnos hacia lo compra de un telescopio tenemos que averiguar, y no es tarea fácil, si este reciente interés por la astronomía va a ser algo pasajero o si va a despertar en nosotros una fructifera afición. Después de pensarlo durante un rato seguro que te has convencido a ti mismo de que esta afición va a ser duradera y que quieres, sea como sea, un telescopio.

Uno de las cosas fundamentales en astronomía es la paciencia. Pasarás noches enteras intentando encontrar una nebulosa y no darás con ella, pasarás medio invierno esperando a que despeje una sóla noche para sacar el telescopio o, incluso cuando lleves ya años en esto, pasarás toda la noche intentando que funcione el autoguiado, las cámaras, la montura y no consigas saber porqué no funciona nada. Paciencia. Roma no se construyó en un día.

Telescopio con Venus y la Luna

Comprar un telescopio supone un desembolso importante y, si al final resulta que no le damos uso, habremos tirado el dinero. Por ello, es recomendable empezar con unos simples prismáticos y un planisferio. O mejor incluso, con una tumbona, una manta y un cielo oscuro. Te sorprenderá la gran cantidad de objetos (nebulosas, galaxias, cúmulos) que se pueden observar a simple vista de un cielo decente. Si queremos avanzar un poco más en nuestras observaciones, la opción de los prismáticos es ideal. Podrás seguir tumbado, gozando de las maravillas del cielo sin tener que preocuparte por todos los cacharros que necesita un telescopio y con un gasto sumamente pequeño. Podemos encontrar prismáticos desde unos pocos euros (como los prismáticos del Lidl por 20€) o, si queremos algo mejor, podemos tener unos buenos prismáticos que nos durarán toda la vida por poco más de 100€, un gasto ínfimo comparado con un telescopio.

 Prismáticos Bresser 10x50 - lidlprismáticos por 20€

Salir al campo a observar el cielo y olvidarse del resto de problema es una gozada. Pronto seguro que quieres compartirlo con tu pareja, con tus amigos o con tus hijos y, poco a poco, ir enseñándoles lo aprendido. Convénceles para ir contigo. Al principio te tomarán por loco pero insiste un poco y te acompañarán.

En internet puedes encontrar muchísima información sobre astronomía. Descárgate un planetario virtual como el Stellarium (software gratuito), acude a la biblioteca municipal y busca libros de astronomía y ve consultando las dudas que vayas teniendo en internet o en libros.

Captura de pantalla del Stellarium

Según vaya transcurriendo el tiempo, querrás compartir esta maravilla que estás descubriendo con más aficionados. Busca una asociación de astrónomos por tu zona y sal con ellos. Posiblemente se reúnan en un local una vez por semana o por mes y seguro que organizan varias salidas, visitas, charlas o cursos de iniciación. Estos cursos y charlas te vendrán muy bien para ir aprendiendo y te podrán orientar hacia los siguientes pasos. ¡Y no te pieras la próxima salida que organicen! Es la ocasión perfecta para observar a través de un telescopio. Es más, podrás observar a través de distintos telescopios y así comprobar en directo cual te gusta más. Es necesario apuntar que no existe el telescopio perfecto, ni siquiera existe un criterio absoluto por el que decir que un telescopio es mejor que otro. Cada ojo y cada persona es un mundo y lo que uno puede observar sin ningún problema a otro le puede costar horrores. Lo único que sí podemos afirmar es que el mejor telescopio es el que más se usa. Eso es innegable. ¿De qué vale tener un telescopio de varios miles de euros si pesa tanto y necesita de unas condiciones atmosféricas tan buenas que sólo lo podemos usar dos veces al año!?

 Una salida de aficionados

Si ya has probado todo esto y sigues queriendo observar y aprender entonces es el momento acertado para comprar un telescopio. Elegir un modelo en concreto resulta complicado. En internet tienes muchos consejos a la hora de comprar un telescopio que te podrán ayudar. Apúntate a un foro, pregunta a los demás aficionados, prueba distintos telescopios, ve a una tienda a que te aconsejen y, sobre todo, tómatelo con calma, es una decisión más complicada de lo que parece. Mientras decides cual es el que más te convenga, podrás seguir observando con los prismáticos, llendo a salidas al campo, leyendo y, en definitiva, aprendiendo.


Pero si has leído todo esto y no te ha convecido y quieres comprar un telescopio, ten en cuenta lo siguiente. Un telescopio es un instrumento óptico bastante sofisticado en el que suele ser acertado decir que a más caro, mayor calidad. Es evidente que llegados a este punto, el presupuesto es determinante. Pero creo que, a la hora de comprar un telescopio, hay que estirar el presupuesto todo lo que se pueda y alejarse de telescopios que puedan ser más un juguete que un instrumento. Muchas veces, por ahorrar un poco, acabamos comprando un telescopio que no sirve para nada más que para quitarnos esta bonita afición. Hay que encontrar un equilibrio entre un telescopio demasiado bueno que se nos vaya a quedar grande para empezar y un telescopio demasiado malo que no nos vaya a ofrecer nada. A la hora de comprarlo, huye de grandes superficies y marcas como Seben y B&Crown.

Roberto Bravo


Quizá te interese:

Posted by Roberto | en 10:05

1 comentarios:

Akeru dijo...

Excelente artículo, Rober. Estos consejos son los que suponen la diferencia entre entrar con buen pie en la afición o desmoralizarse a las primeras de cambio.
Me acuerdo que fue precisamente hace cosa de 2 años cuando por navidades me regalaron unos oculares con los que volví a retomar la afición.
Se acercan buenas fechas astronómicas
¡Un abrazo!