Salida astronómica en Brihuega 04-02-2011

El pasado viernes nos reunimos unos cuantos aficionados a la astronomía en una explanada cerca de Brihuega (Guadalajara). Llegué cuando el Sol estaba desapareciendo por el horizonte y ya había allí tres personas con sus respectivos telescopios montados. Saludé a los compañeros, a los que hacía mucho que no veía, y me puse a montar mi equipo. Esta vez llevé el newton 150/750 para ver si me ayudaban a colimarlo bien, porque desde que lo desmonté para cambiarle el enfocador por un crayford no había conseguido dejarlo fino. Poco a poco fue llegando más gente hasta un total de 10 coches y unas 15 personas. Al caer la noche estábamos a 0ºC pero eso no desanimó a nadie. Teníamos una noche espectacular y había que aprovechar. Ni un nube en el cielo y una transparencia bastante buena... 

Nada más montar el telescopio, saqué la cámara para hacer una sencilla foto del telescopio y el cielo para subirla al blog. La primera fotografía que hago y aparece una estrella fugaz atravesando el cielo, ¡menuda suerte!



Pasé casi toda la noche al lado del LB12'' de Vicente ("Lupa"), dejando un poco descuidado a mi pequeñín. Lo primero que observamos fue lo más impresionante que he visto hasta el momento: la supernova SN2011B, con una magnitud de 12,5 en la galaxia NGC2655. Se veía perfectamente la débil galaxia y se apreciaba un pequeño puntito brillante muy cerca del núcleo. ¡Era la explosión de una estrella en otra galaxia! Sin duda, es lo más espectacular que he llegado a ver a través del telescopio. 
También observamos la nebulosa del Esquimal y pudimos llegar a ver la estrella interior que dio lugar a esa nebulosa planetaria. Más tarde la observamos a través del LB16'' de Patricio ("arbacia") y la diferencia era notable pero el 12'' de Vicente no se quedaba muy atrás. También hubo lugar para los objetos más comunes como la Nebulosa de Orión, el Doble Cúmulo de Perseo, la Galaxia de Andrómeda, las Pléyades. La imagen del Doble Cúmulo a través del Takahashi 130 de Miguel ("Popeye") era espectacular... ¡qué nitidez! ¡qué puntualidad en las estrellas!

Pero no me olvido de mi pequeñajo, que se defendió tremendamente bien, ofreciéndonos una imagen muy clara del Triplete de Leo -un conjunto de tres galaxias-, que dejó gratamente sorprendido a más de uno. M78, M41, M33, M81 y 82, también tuvieron su sitio entre los distintos telescopios que había allí montados.

Al final, a eso de las 12 de la noche comenzamos a recoger unos cuantos y nos volvimos para casa. A esa hora el termómetro marcaba -8ºC y las botellas de agua, los coches, los maletines y demás cacharros se habían congelado. Por supuesto, los telescopios también sufrieron las gélidas temperaturas, como bien demuestra esta foto de la capa de escarcha que tenía mi tubo.


Todo lo que observamos esa noche fue una pasada pero no cabe duda de que lo mejor de todo fue la merendola que nos montamos entre todos. Tortilla de patatas casera, bocatas, caldo calentito... mmm... y de postre, un chocolate caliente riquísimo, rosquillas... mmm... ¡Qué rico todo! ¡Qué bien sienta una buena cena en el campo a la luz de las estrellas y rodeado de buenos amigos. A ver si las nubes se portan tan bien como este fin de semana y no tenemos que esperar tanto tiempo para volver a salir de observación.

Posted by Roberto | en 13:30

1 comentarios:

Akeru dijo...

Una jornada completita de observación ¿eh? No os faltó de nada.
Coincido contigo en lo espectacular de observar una supernova. Parece mentira tanta energía desatada.

Salu2.